martes, 4 de marzo de 2008

De molinos, locas, montañas, vascos y fiebres

Dos meses llevo aquí, dos meses. Se dice de manera apresurada y pasan aún de manera mas rápida. Por desgracia para mí no han sido demasiado intensos aunque no por ello faltos de interés, sigo dándole vueltas al tren de potencia de los molinos de viento, parcialmente tedioso. También en mi casa hemos adquirido un nuevo inquilin@, de profesión peluquero, actualmente en el paro salvando que los sábados por la noche baila en una discoteque, así es, es gogo de discoteca, yo personalmente le llamo la loca, y creo que me quedo corto, siempre he sido muy tolerante pero este personaje me saca de quicio. En cuanto a mi vida social por estos parajes es practicamente inexistente, pues mis amables compañeros de trabajo viven lejos de aquí, y me encuentro que la juventud universitaria de este lugar escapa cuando yo descanso con lo que me resulta complicado coincidir con ellos, tampoco he podido aún visitar al doctor C. incompatibilidad de agendas, con lo que atendiendo a una de las más arraigadas costumbres vascas me he puesto a caminar por la montaña con no poca fruición, bellos parajes y elevado agotamiento, rodeado de deportistas (los lugareños me han sorprendido con una actividad física realmente intensa), me he encontrado ciertamente débil, espero remediarlo durante mi estancia. Este último fin de semana me he acercado a los madriles pues andaba necesitado de un poco de ocio nocturno, cosa que logre a costa una vez más de mi salud pues al día siguiente amanecí con no poca fiebre o fiebrulas o como se diga. Poco más, en breve tendré que ir a barna a presentar algún resultado, inexistente hasta ahora, a la empresa que contrata el estudio en el que yo me inscribo, y también confio en poder visitar al doctor así como algo de turismo costero. También como no algun tipo de acontecimiento que me prive de la convivencia con christian, pues así se llama el susodich@. Me despido, con amor, cariño y bacalao.

Atentamente

P.D. Me siento obligado a comunicaros que se celebraran en esta empresa, la mia, juegos rurales vascos y ya he sido inquerido por mi habilidad con el hacha, como supondreis estoy ansioso por demostrarles mi maestria con tan delicado instrumento.